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El Ramadán es el mes sagrado en el islam. Es un mes festivo de oración, celebración de la fe y de las tradiciones que se festeja a lo largo de todo el globo en el noveno mes del calendario lunar musulmán. Durante la celebración del Ramadán se practica el ayuno desde el alba hasta el anochecer, pero este es sólo el aspecto más conocido de esta celebración para los no musulmanes. Os contamos todos los detalles de esta celebración histórica que lleva celebrándose desde la Edad Media. 

Tiempo de lectura: 10 minutos

El islam es la segunda religión más practicada del mundo. Esta creencia basa sus fundamentos en 5 pilares principales que todo buen musulmán debe seguir. El primero de estos pilares, y el más importante, es el de la profesión de la fe o Shahadah y promulga que solo existe un Dios y que Mahoma es su profeta. El segundo es el de la oración o Salah, este pilar indica que hay que rezar mirando a la Meca 5 veces al día. El tercer pilar, Zakat, exige a todo buen musulmán dar dinero a los pobres o a obras de caridad. El cuarto pilar, y del que hablaremos más extensamente a lo largo de este artículo, es el conocido como Sawn y se trata del ayuno desde el amanecer hasta el atardecer durante el mes del Ramadán. El quinto y último, Hajj, invita al peregrinaje a la Meca al menos una vez en la vida a quien pueda permitirse el viaje. 

Los orígenes del islam se remontan al año 610 de nuestra era, año en el que el arcángel Gabriel se apareció a Mahoma en la cueva de Hira, cerca de la Meca, y le desveló el Corán. Este es el libro sagrado del islam y se cree que la revelación o Laylat Al Qadar tuvo lugar durante el mes del Ramadán, mes que también formaba parte del calendario de los antiguos árabes. Desde entonces, además del nombre de un mes, Ramadán también es el nombre de la celebración más importante del rito islámico, en la que se conmemora la epifanía del Corán a Mahoma. 

Existen evidencias históricas de la celebración del Ramadán desde hace 14 siglos y, como ya hemos mencionado, se celebra en el noveno mes del calendario musulmán. Al ser este un calendario lunar la fecha no siempre es la misma en el calendario gregoriano. El cálculo tradicional se hace observando las fases lunares. La celebración del Ramadán comienza con el avistamiento de la luna creciente en el noveno mes y termina con el avistamiento de la siguiente luna creciente. En Arabia Saudí hay un comité de avistamiento de la luna, ente encargado de determinar el inicio y fin del mes sagrado. 

Durante las cuatro semanas que dura el Ramadán se lleva a cabo un ayuno desde el alba hasta el anochecer. Los países con sol de medianoche o noche polar siguen el horario de la Meca o el del país más próximo con diferencia entre noche y día. Una vez que el sol se ha puesto llega el momento de comer y de socializar. Muchos musulmanes aprovechan este momento reuniéndose con familiares y amigos para romper el ayuno juntos. Tras la oración de la tarde, maghreb, da comienzo la comida de la noche conocida como iftar. Antes de que amanezca y de la primera oración de la mañana o fajr, tiene lugar el suhoor o desayuno previo al amanecer. Respecto a los alimentos que se comen una vez roto el ayuno varían dependiendo de los diferentes países. Los dátiles están presentes en casi todas las regiones dado que son gran fuente de energía y nutrientes. Durante el suhoor son más típicas las frutas, los cereales y los lácteos mientras que durante el iftar suelen consumirse platos más contundentes a base de carne y arroz.

Además del ayuno de alimentos y bebidas durante el día, también se abstienen de tener relaciones sexuales, de fumar y del comportamiento inadecuado o pecaminoso en general. No obstante, esta celebración no es solo el ayuno y la abstinencia. Durante el mes sagrado del Ramadán los musulmanes dedican su tiempo a la reflexión y al crecimiento espiritual para establecer un vínculo más sólido con Alá. Para ello rezan, recitan el Corán y evitan los conflictos, las peleas, las mentiras o los cotilleos. Existen algunas excepciones a la hora de cumplir el ayuno. Las mujeres embarazadas, en periodo de lactancia o de menstruación, así como los ancianos débiles, niños pequeños, personas enfermas y personas que se encuentren de viaje pueden comer y beber en las horas de sol. Una vez pasado el periodo de exención del ayuno se pueden recuperar los días perdidos haciendo ayuno durante el resto del año. 

Una vez terminado el último día del Ramadán y con el inicio del siguiente mes lunar, shawwal, se celebra la fiesta de ruptura del ayuno o Eid al-Fitr. Esta celebración puede prorrogarse hasta por tres días y dependiendo del país se realizan diferentes actividades. En general en la mayoría de los territorios tienen lugar una serie de oraciones comunitarias al amanecer y la gente se reúne para comer, rezar y presentar sus respetos a los familiares fallecidos. En algunos lugares se intercambian regalos o se organizan carnavales. 

Sin duda el Ramadán es la gran fiesta del islam, una época de tradición y devoción para los musulmanes. Pero también para otras personas que aún no siendo religiosas lo celebran como costumbre familiar, regional o como reto personal. Desde La Lechuza Inquieta queremos desearles a todas esas personas que en estos días se encuentran celebrándolo: ¡RAMADAN KAREEM!

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