La Armada Invencible inglesa, el mayor desastre naval de la historia de Inglaterra

El 28 de abril de 1589, una imponente flota de 180 buques con mas de 26.000 hombres a bordo, partía de Plymouth con el objetivo de atacar España. Sus colosales cifras la hacían imponente. Pero al volver a Inglaterra, sólo estaban a flote 102 barcos y quedaban vivos 3.722 hombres. El mayor desastre de la historia de Inglaterra

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Por Francisco Javier Hernández Méndez

La Armada Invencible Inglesa, Contra Armada o Expedición Drake-Norreys fue una flota de invasión enviada contra la Monarquía Hispánica por la reina Isabel I de Inglaterra en 1589, como parte del conflicto conocido como la Guerra Anglo-Española de 1585-1604, siendo esta una respuesta directa a la conocida como Armada Invencible Española.

Tras el fracaso del intento de invasión española de Inglaterra, un año después, en 1589, Isabel I de Inglaterra autorizó la formación de una armada constituida por unos 180 buques y más de 26.000 hombres, cuyo objetivo era el de aprovechar el fracaso de la Armada española del año anterior. El mando de la operación fue destinado inmediatamente a Sir Francis Drake y John Norreys, quienes se encargarían de comandar la flota y las tropas de tierra en el desembarco, respectivamente.
Los objetivos de la misión eran los siguientes:

-aprovechar la debilidad de la flota española (recordemos que la escuadra principal se encontraba dañada tras el revés sufrido en Inglaterra), destruir el grueso de la armada y acabar con los barcos españoles supervivientes del desastre de 1588, los cuales se encontraban reparándose en el puerto de Santander.

-tomar Lisboa con la ayuda de los portugueses, levantar Portugal en contra de España y entronizar a don Antonio de Portugal, prior de Crato (pretendiente a la corona portuguesa desde 1580), el cual había sido derrotado en la batalla de Alcántara y expulsado por Felipe II.

-ocupar las islas Azores para colapsar el comercio español con el Nuevo Mundo y adoptarlas como base inglesa en el Atlántico, disponiendo así de un territorio en ultramar desde donde establecer el control de las rutas comerciales hacia América.

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Monarquías enfrentadas: Felipe II de España e Isabel I de Inglaterra. Crédito al final

No obstante, ya desde su preparación, la empresa contó con graves deficiencias logísticas y disciplinarias. Los ataques iniciales en Galicia se convirtieron pronto en fracasos por la reacción de la población y la resistencia defensiva, al igual que sucedería en Lisboa, terminando en un estrepitoso fracaso. Después, la escuadra inglesa se dirigió a las Azores, donde también fue derrotada, saqueando Madeira y Vigo a su regreso, volviendo a Plymouth al cabo de tres meses. La Guerra Anglo-Española se prolongaría irremediablemente en el tiempo hasta la firma de paz con el Tratado de Londres de 1604. Así pues, tanto la Armada Invencible Española como la Contra Armada Inglesa demostraron la imposibilidad de ambas potencias (la Monarquía Hispánica y la Corona Inglesa) por hacer perecer a su rival con los medios de que se disponían en la época.

En resumidas cuentas, tras el fracaso de la Armada Invencible, Inglaterra preparó una imponente fuerza de represalia con más naves y soldados que su antecesora, pero con similares resultados. La expedición comandada por Francis Drake y John Norris cuyo objetivo final era el de acabar con la superioridad de la monarquía hispánica fue un completo fracaso, mayor incluso de lo que pudo haber sido la Armada Invencible Española, dado el calibre y el coste de la fatídica expedición. No obstante, este hecho ha quedado pormenorizado en la historia frente a su precedente español.

Desastre-de-la-Armada-invencible
Desastre de la Armada Invencible en 1588.
Créditos al final

Con Sir Francis Drake como almirante y John Norris en calidad de general de las tropas del desembarco, a la expedición se sumaría don Antonio de Portugal, prior de Crato, pretendiente al trono portugués (hijo bastardo de uno de los hermanos del rey Juan III), quien se presentaría ofreciendo a la Corona Británica cinco millones de ducados y la autorización para que Inglaterra dispusiera de su propia guarnición en los castillos portugueses si este lograba hacerse con el poder. Este logró convencer a la reina de que la población de Lisboa se levantaría contra los españoles.

Así pues, el 28 de abril de 1589, con un total de 180 barcos y más de 26.000 hombres (la Armada Invencible Española contó con 137 barcos y cerca de 25.000 hombres), la expedición partió desde el puerto de Plymouth. En lugar de dirigirse a Santander (según el plan inicial), pusieron rumbo a La Coruña, dado el temor de verse sorprendidos por la flota española en el Cantábrico. A pesar de que los ingleses no disponían apenas de experiencia en la organización de grandes campañas navales (muestra de ello es el hecho de que todos los ataques desde el mar fueron rechazados), fue imposible impedir el desembarco y el posterior asedio de La Coruña ya que el número de tropas estacionadas en Galicia era sumamente escaso.

Los buques ingleses entraron en la ría de La Coruña y desfilaron frente al castillo de San Antón, que abrió fuego, haciendo que dos de ellos encallaran en la playa de Santa María de Oza. Entre la mañana del 4 de mayo y la noche del 5 de mayo, cerca de 1.500 hombres comandados por Francis Drake desembarcaron en la costa de La Coruña, sin encontrar apenas resistencia, traspasando el muro que flanqueaba la ciudad y obligando a la guarnición a replegarse hacia la antigua ciudad medieval. Entre los días 6 y 11 de mayo, los defensores se dedicaron a reforzar con piedras las murallas de la ciudad, logrando repeler varios ataques en la muralla, a la vez que los sitiadores excavan un túnel para poner una mina bajo una de las torres que se encontraba enfrente del monasterio de Santo Domingo, con la intención de abrir una brecha. No obstante, durante el domingo 14 de mayo, en un intento de dinamitar la pared, 300 ingleses quedan sepultados, mientras que el resto de las fuerzas inglesas se abalanzó sobre una apertura hecha en la muralla por la artillería inglesa, desatándose una lucha sobre los escombros de la muralla.

Tras varias horas de combate, y ante la escasez de soldados españoles, la población civil se reveló en armas. Es en este momento cuando entra en acción doña María Mayor Fernández de la Cámara y Pita (Conocida como María Pita, nombrada Alférez Perpetuo por Felipe II), comandando a un grupo de mujeres que arremete contra los invasores ingleses, permaneciendo en el lugar para auxiliar a los combatientes y ayudarles a cargar cañones, arcabuces y mosquetes.

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María Pita, heroína española. Créditos al final

Finalmente, tras el estrepitoso desastre de su misión, el día 19 de mayo los ingleses optan por la retirada, las tropas se repliegan y zarpan rumbo a Lisboa tras perder un total de 1.500 hombres.

El día 25, los buques ingleses fondearon a la altura de Peniche, en la zona norte de Lisboa. Tras una larga discusión sobre la estrategia a seguir, John Norris desembarcó con el grueso de su ejército al día siguiente, con la intención de atacar la ciudad. No obstante, estos se encontraron con una considerable defensa, la cual había sido prevenida del ataque. El 28 comenzó la marcha hacia el sur, dejando una guarnición de 500 hombres en Peniche y llegando a Lourinha, donde no se consiguió levantar en armas a los portugueses. El mismo día, Drake levó anclas y se dirigió a Cascais, en busca de provisiones.

El día 30 las tropas de Norris llegaron a Loures en las proximidades de la capital (Lisboa). No obstante, el 31 de mayo las tropas que defendían la capital llevan a cabo un asalto nocturno contra el campamento inglés que culmina con centenares de bajas en el ejército invasor. Por si fuera poco, en este momento aparece Alonso de Bazán (hermano de Álvaro de Bazán, primer marqués de Santa Cruz) al mando de la flota española.

Ante lo sucedido, dada la situación de las tropas inglesas y la falta de provisiones, Norris decidió evacuar el campamento en la noche del 4 al 5 de junio, intentando huir dirigiéndose hacia Cascais, donde estaría protegido por la flota de Drake, pero es descubierto por los españoles, que inician su persecución. Las tropas inglesas son sorprendidas por la artillería de las galeras españolas dirigidas por Bazán, ocasionando numerosas bajas y ralentizando la marcha. Mientras los barcos bombardeaban a los ingleses desde el Tajo, más de 6000 hombres hostigan a los ingleses en tierra. Por otra parte, el total de las bajas inglesas durante la marcha fue de 500 hombres y dos banderas (conservadas actualmente en la catedral de Sigüenza).

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Recorrido de “La Invencible Inglesa”. Créditos al final

El 16 de junio, Francis Drake, acorralado, ordena zarpar inmediatamente, sin decidir todavía si ir a Inglaterra o a las Azores, pero la flota española le alcanza en la desembocadura del Tajo, perdiendo siete barcos y 700 hombres (130 fueron hechos prisioneros, entre ellos tres capitanes, un alférez, un oficial de ingenieros y varios pilotos). Mientras que los españoles solo tuvieron 2 muertos y 70 heridos.

Drake se dirigió hacia mar abierto, ya que sus intenciones eran volver a Inglaterra dada la escasez de alimentos y el mal estado de salud de sus dotaciones, que iban muriendo por escorbuto, hambre y herida. Llegado este punto, no está claro si lograron realizar un ataque en las Azores o simplemente pasaron los días en mar abierto hasta que tomaron la decisión de regresar en busca de provisiones antes de partir hacia Inglaterra.

Finalmente, el día 27 de junio, los buques regresaron a Vigo, con la intención de obtener provisiones. La ría gallega no estaba bien defendida; es más, era uno de los puntos débiles de Galicia, ya que no había fuertes y las tropas eran muy escasas. En la mañana del 30 de junio los ingleses empezaron a desembarcar en Teis, la playa de Coya y la ribera del río Berbés. Las tropas inglesas saquearon, quemaron y profanaron iglesias, hospitales y otros edificios de la ciudad.

El sábado 1 de julio, Luis Sarmiento llegó a la ciudad con 500 soldados para reforzar la defensa y atacar a los ingleses. A las ocho de la mañana del día 2, derrotada, la Armada inglesa se hizo a la mar desde la ría de Vigo, donde había perdido varios cientos de hombres. Los ingleses perderían 5 barcos más en su retirada (incluyendo 2 galeones capturados).

Derrotada y dispersa, la armada inglesa regresa finalmente a Inglaterra el 10 de julio. De los 180 buques volvieron solo 102. Muchos de los tripulantes llegaron infectados de peste, que propagaban al bajar a tierra. Mientras que, de los más de 26.000 hombres que componían la expedición inicial, solo 3.722 sobrevivieron. Como conclusión, las pérdidas duplicaron las de la Armada Invencible, convirtiéndose en el mayor desastre naval de la historia de Inglaterra. No obstante, el fracaso inglés quedó oculto en la historia.

Créditos imágenes:

htps://commons.wikimedia.org/wiki/File:Mapa_contraarmada.svg

htps://www.meisterdrucke.es/impresion-art%C3%ADs􀆟ca/Flemish-School/1027974/La-Armada-Invencible-Batalla-naval-que-supuso-la-derrota-de-la-Armada-espa%C3%B1ola-frente-a-la-flota-inglesa-en-agosto-de-1588,-escuela-flamenca.html

htps://www.npg.org.uk/collec􀆟ons/search/portrait/mw02075/Queen-Elizabeth-I

htps://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Portrait_of_Philip_II_of_Spain_by_Sofonisba_Anguissola_-_002b.jpg

htps://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/maria-pita-heroina-espanola-997277/html/f04aef3b-af17-40e7-99cf-c148b3cf02c2_2.html

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